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"Amar no es solamente querer, es sobre todo comprender" Francoise Sagan

Consultoría y asesoría psicológica familiar para resolver cualquier dificultad y preocupación que afecte al vínculo padres-hijos.

• Información y orientación sobre las dudas cotidianas en la educación de los hijos.
• Intervención en el proceso de interacción familiar para optimizar las relaciones familiares y el desarrollo psicológico infantil y juvenil (estrategias de educación, autoestima, gestión de conflictos, afectividad, patrones educativos…)
• Ayuda a prevenir problemas del desarrollo infantil y adolescente.
• Soluciones concretas, personalizadas y ajustadas a la realidad familiar.

El término de neurodiversidad lo propuso en 1998 Judy Singer, que era autista, en rechazo a la visión del autismo como discapacidad. No obstante, con el tiempo se ha ido extendiendo su uso a otras condiciones como el Déficit de Atención con y sin Hiperactividad, la Dislexia, la Discalculia, el Síndrome de Tourette y la Dispraxia. La idea de Judy Singer es que hay diferentes conformaciones cerebrales, que resultan en distintas expresiones de cómo se percibe y se procesa el mundo y ninguna es mejor que las demás. Por tanto, las diferencias neurológicas existentes en el autismo y otras condiciones, no por ser diferentes son negativas. Determinados modos de funcionar resultan los mejores para según qué tipo de objetivos. En el caso por ejemplo del autismo se observa en las pruebas de inteligencia que los autistas presentan una descompensación entre las puntuaciones en distintas áreas, llegando a no poderse interpretar meramente la media de los resultados de todas las pruebas, como se suele hacer de forma habitual con personas que no presentan esta condición, ya que dicha media no representa bien la disparidad en los resultados. Un autista puede tener áreas en las que sí exista un déficit importante que requiera apoyos y otras en las que su puntuación sea normal o incluso que esté por encima de la media. Concebir el autismo de manera negativa no daría cuenta de los potenciales de la persona autista. ¿Cómo se podría tener esta visión negativa cuando en determinados aspectos la persona puede destacar positivamente? ¿Acaso no nos pasa a todos que tenemos tareas que se nos dan mejor y otras que se nos dan peor? ¿Por qué un autista va a ser peor por esto?

Es muy importante ser consciente de la neurodiversidad a la hora de prestar atención psicológica a la población, porque no todos somos iguales ni actuamos de la misma manera. La mera petición de ayuda profesional, puede ser muy distinta a lo común si la persona presenta una neurodivergencia. Es por ello que es fundamental que todo profesional que se vaya a dedicar a la atención psicológica se forme debidamente en la identificación, diagnóstico y abordaje de dichas condiciones o, al menos, sea capaz de detectarlas para hacer la derivación al especialista más adecuado.

Muchas personas neurodivergentes hoy día siguen sin haber sido detectadas debido al desconocimiento general que existe entre profesionales con respecto a este tema, desarrollando finalmente trastornos secundarios a sus propias dificultades de adaptación al entorno por su diferencia, como ansiedad y depresión. Muchas veces dichos problemas emocionales se convierten en más limitantes para la persona que la propia condición como autista, TDAH, etc. Es por ello que conviene detectar precozmente cualquier neurodiversidad, porque en el momento en que una persona descubre que forma parte de ella y que esto no es algo negativo, deja de presionarse de una forma tan dura para ser como los demás y deja de intentar encajar en una manera de ser que no es la suya. Descubre que precisamente en su diferencia puede radicar su genialidad. Y desde el propio conocimiento de su funcionamiento es como finalmente es capaz de saber de qué manera actuar para conseguir lo que desea.

Una persona neurodivergente supone un reto de auténtica empatía por parte de profesional, porque supone salir de su propia estructura de pensamiento para ponerse en la de alguien cuyas percepciones, sentimientos y comportamientos distan en gran medida de lo común. Toda idea preconcebida que se tenga puede ser derruida cuando te encuentras con una persona neurodiversa. Pero en realidad las ideas preconcebidas no suelen favorecer el trabajo de un psicólogo, porque habitúan de alguna forma a distorsionar lo que vemos en el otro con nuestras propias ideas. Así pues, aprender a tratar la neurodiversidad es aprender a ser realmente un buen profesional. Porque si queremos favorecer una buena salud mental en esta sociedad nunca hemos de olvidar a este colectivo que, además de conocerse cada día que es mayor de lo que se pensaba, puede ser clave para el avance de la sociedad en muchos aspectos.

Se sabe que todos somos diferentes y que a veces esta diferencia podrá ocasionarnos ciertas dificultades de adaptación, a veces por motivos propios de la condición en cuestión y otras por vivir en una sociedad que aún observa con cierto recelo a la diferencia. Pero lo que nunca hemos de olvidar es que todos somos necesarios. Y dar oportunidad al desarrollo de las personas neurodivergentes, nos enriquece como sociedad y nos hará llegar más lejos en todos los campos, porque alguien neurodiverso puede ser precisamente el que vea el detalle que a una persona que no lo es se le escapa. Un neurodiverso, puede plantear soluciones fuera de lo común y poner fin a problemas que se creían irresolubles. Que el miedo a lo diferente no acabe bloqueando nuestro futuro.

Paloma Gimeno - Psicóloga, experta en autismo y autista

Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) están caracterizados por una alimentación alterada y la aparición de conductas restrictivas o compulsivas hacia la comida. Engloban la bulimia, la anorexia nerviosa y el trastorno por atracón.

Estos trastornos están experimentado un preocupante crecimiento, afectando a personas de todas las edades, presentando una alta cronicidad, por lo que requieren una respuesta profesional cualificada y de calidad.

Desde PSIDES valoramos estos trastornos como un reflejo de uno o varios problemas que subyacen desde hace tiempo en la persona que los padece, siendo en este caso un síntoma de algún desajuste más profundo.

Se trata de enfermedades desencadenadas por varios factores personales, familiares y sociales. Por ello, para conseguir el éxito en el tratamiento es indispensable un abordaje integral, donde psicólogos, médicos y nutricionistas puedan coordinarse para ir abriendo el camino hacia la recuperación de la salud y el bienestar del paciente.

"La carrera de la vida no la gana aquel que se esfuerza por superar a los demás, sino el que logra competir, luchar y superarse a sí mismo" Alfredo Díez

El coaching es un tipo de intervención para mejorar lo que hacemos, en la cual se explora en detalle qué hacemos, cómo hacemos y por qué hacemos como hacemos, y a partir de esa información precisa poder hacer cambios efectivos y desarrollar habilidades útiles para nuestra vida en conjunto.

A través de un proceso dinámico de exploración, investigación y descubrimiento que nos permite comprender en detalle qué y cómo hacer. Nuestra tarea es crear las condiciones favorables para el desarrollo del cliente, enseñarle cómo hacer los cambios y cómo mantenerlos, específicamente en aquellas situaciones que requieran de ayuda. Ayudamos a aprender, no solo a una mera adquisición de conocimientos, ya que necesitamos aprender desde el conocimiento del mundo, hechos e información hasta habilidades cognitivas y emocionales.

Es importante desarrollar las habilidades para satisfacer nuestras necesidades y gestionarnos eficazmente ante los retos y desafíos de la vida diaria. El mundo está cambiando constantemente, por lo que necesitamos desarrollar una serie de habilidades para gestionar los cambios de manera eficaz.

Necesitamos aprender a tomar decisiones, a motivarnos, a planificar, a gestionar nuestros objetivos y direcciones, explorar en detalle nuestras razones y propósitos, desarrollar nuestro nivel de conciencia, responsablidad, autonomía y compromiso.

En cualquier momento de nuestra vida podemos sentir la necesidad de hacer algún cambio o mejora. El coaching es útil para mejorar todo lo que hacemos: pensar, sentir, hacer. La relación entre pensar, sentir y hacer es un hecho, el pensamiento tiene efectos físicos directos, ya que mente y cuerpo funcionan como un sistema. Tener conciencia de ésto nos ayuda a atender tanto a nuestros pensamientos como a nuestros sentires, “pensamos con todo el cuerpo”. Hay muchas formas de pensar y sentir, unas son más útiles que otras, y el aprender a sentir y pensar eficazmente posibilita sentimientos de armonía, equilibrio y bienestar.

La capacidad de pensar abarca una serie de habilidades, entre ellas la gestión de la atención y concentración, razonar, conceptualizar, abstraer, generalizar, clasificar, recordar, imaginar, etc. Conocer para qué sirven y gestionar las emociones es vital para tener una mayor calidad de vida. Las emociones nos dan información y nos ayudan a identificar diferentes aspectos de las situaciones que estamos viviendo, de las que no somos conscientes. Nos permiten conocernos más y nos ayudan a relacionarnos eficazmente con los demás. Cuando no expresamos nuestros sentimientos o lo hacemos de una manera inadecuada, podemos tener dificultades y nuestra salud se puede ver afectada.

"Los golpes de la adversidad, y aun los de la violencia, son amargos, pero nunca son estériles." Joseph Ernest Renan

• Pérdidas traumáticas
  • Enfermedad
  • Accidentes
  • Muertes violentas o repentinas de seres queridos
  • Abandono
• Maltrato familiar
• Violencia de género
• Acoso Escolar (Bullying)
• Acoso laboral (Mobbing)